¿Cómo afecta el cambio climático al ciclo del agua?

Todas y todos recordamos haberlo aprendido en el colegio, sin embargo, el calentamiento global afecta y afectará su equilibrio en el futuro.  Pero primero un repaso:

Podemos decir, para fines de este artículo educativo, que el ciclo comienza con el choque de las nubes que provienen del océano con montañas frías, en nuestro caso, con la cordillera de Los Andes; de esta forma el vapor de agua precipita en forma de lluvia o nieve. La lluvia nutre de agua dulce los ríos superficiales, el suelo, y los ríos y napas subterráneas.

En el camino de vuelta al océano, el agua de las napas es absorbido y emitido de vuelta a la atmósfera a través de bosques húmedos como la Amazonía creando “ríos flotantes”, además de emitir polvo de hadas o partículas de olor que juntan gotículas de vapor de agua a su alrededor, formando así nubes de origen continental.

En los inicios de las civilizaciones estar cerca de ríos o cauces de agua era crucial para la supervivencia, en la actualidad los afluentes superficiales ya han sido utilizados o destinados a diversas industrias, por lo tanto,  la seguridad hídrica yace en las napas y ríos subterráneos.

“…a mayor temperatura global, mayor agua dulce en zonas húmedas que incrementa los riesgos de inundaciones.”

Llegamos al océano y ríos, esteros y napas desembocan sus aguas en conjunto con minerales, compuestos orgánicos y contaminantes; aquí las aguas dulce y salada se mezclan para dar inicio a la producción primaria de las cadenas tróficas marinas.

Mar adentro la radiación solar evapora el agua transformándolo en vapor de agua y en nubes, sin embargo, el calentamiento global es tal que procesos como el derretimiento de glaciares y el aumento del nivel del mar se están acelerando. Un estudio reciente de la Universidad de Nueva de Gales del Sur indica que entre 1970 y 2014 se transportaron desde latitudes tropicales hacia los polos entre 46.000 y 77.000 kilómetros cúbicos de agua dulce más de lo previsto; en palabras simples, a mayor temperatura global, mayor agua dulce en zonas húmedas que incrementa los riesgos de inundaciones.

A su vez se alejan las precipitaciones de las zonas desertificadas, aumenta la humedad ambiental y la sequía, evitando la precipitación del vapor de agua y la infiltración de agua dulce en afluentes subterráneos.

 ¿Qué podemos hacer? Tips para la adaptación climática

• Mejorar la institucionalidad, centralizar la fiscalización y gestión administrativa del recurso hídrico a un par de servicios públicos.
• Mejorar los procesos silvoagropecuarios reduciendo el consumo de agua y la utilización de pesticidas y fertilizantes que se infiltran en las napas subterráneas poniendo en riesgo el recurso para el consumo humano.
• Mejorar los procesos mineros y de otras industrias que consumen agua; que el reciclaje de aguas sea la normativa.
• Identificar a los territorios más vulnerables social, física y ambientalmente, desarrollar planes para la resiliencia y adaptación climática contextualizada.
• Invertir en programas de reutilización de aguas grises y negras a nivel regional,  municipal y domiciliario, fomentando las tecnologías nacionales.
• Entregar herramientas y conocimientos a las comunidades para lograr la equidad social y ambiental necesaria para adaptarse a la escasez hídrica.

El agua es primordial para la vida y sus procesos, según las proyecciones el requerimiento hídrico aumentará un 55% por el crecimiento de la población: hoy más que nunca es urgente activar planes que involucren a todas y todos en la gestión del agua, y así garantizar la seguridad hídrica y alimentaria para las futuras generaciones.